La Diputación de Barcelona ha presentado un nuevo recurso digital para fomentar la transformación agroalimentaria artesanal en la provincia. El manual 'Territorio artesano: Guía práctica para impulsar obradores y pequeños mataderos compartidos de iniciativa local', disponible en catalán, quiere convertirse en una herramienta esencial para los municipios que deseen apostar por estos equipamientos colectivos como motor de dinamización e innovación.

La publicación aborda de manera integral todos los aspectos necesarios para poner en marcha estos espacios en el ámbito local: desde los estudios de viabilidad iniciales hasta los modelos de gestión, pasando por los requisitos técnicos, normativos y urbanísticos. Además, incorpora ejemplos de iniciativas exitosas y recursos prácticos que facilitan la implementación de estos equipamientos agroalimentarios.

La guía está dirigida a todos los agentes del territorio interesados en impulsar la elaboración de alimentos artesanos, desde agricultores, ganaderos y elaboradores hasta entidades y colectivos comprometidos con promover un modelo de producción alimentaria más sostenible, saludable y cercano. El manual explica las múltiples ventajas que suponen estos equipamientos compartidos. Para los emprendedores que inician su trayectoria y desean probar si sus productos funcionan en el mercado, la oportunidad de utilizar un obrador compartido reduce significativamente la inversión inicial y minimiza los riesgos. Además, dado que estos equipamientos cuentan con toda la maquinaria necesaria para transformar un alimento, los usuarios pueden experimentar con diferentes métodos de trabajo y tipos de elaboraciones hasta encontrar los más rentables comercialmente. Asimismo, el hecho de que tanto el espacio como las herramientas cumplan estrictamente la normativa vigente, permite que sus creaciones satisfagan todas las garantías sanitarias y de calidad requeridas. Finalmente, el ahorro en costes influye en el precio final de los productos, lo que permite a los nuevos artesanos ofrecer alimentos de la más alta calidad a precios asequibles.

Más allá del espacio físico y la maquinaria, estos equipamientos suelen convertirse en auténticos centros dinamizadores que fortalecen el tejido productivo local. La guía destaca cómo numerosos obradores y pequeños mataderos ofrecen programas de formación en ámbitos clave como la producción agroalimentaria, la gestión empresarial o la comercialización, además de asesoramiento personalizado para los proyectos emprendedores. El espacio compartido también facilita la creación de sinergias entre usuarios, fomenta el intercambio de conocimientos y experiencias, y puede dar lugar a colaboraciones que refuercen la economía local.

La publicación, que incluye fotografías de Patxi Uriz, es fruto de una colaboración multidisciplinar que aporta diferentes perspectivas sobre el sector agroalimentario local. Han participado Neus Monllor, consultora agrosocial especializada en desarrollo rural, relevo generacional y sistemas agroalimentarios locales; Anna Roca, profesora de la Universidad de Girona experta en dinamización agroalimentaria; y Sònia Callau, jefa de la Dirección Territorial Agraria de la Diputación de Barcelona. Este proyecto editorial ha sido cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) dentro del programa BCN Smart Rural.

La guía 'Territorio artesano' puede descargarse gratuitamente en la Librería de la Diputación de Barcelona, donde también se encuentran otras publicaciones relacionadas con la agricultura, la alimentación y la ganadería.

Valorar los alimentos de proximidad

En el pasado, los obradores y mataderos compartidos eran espacios clave para mantener la actividad agroeconómica y las identidades alimentarias de los territorios. Estos equipamientos, de tamaño adaptado al ámbito local, dinamizaban las comunidades rurales, impulsando el trabajo de agricultores, ganaderos y elaboradores artesanos. Sin embargo, el modelo agroalimentario actual se ha industrializado y homogeneizado, priorizando el consumo masivo de productos de baja calidad y lejana procedencia. La recuperación de estos espacios colectivos de transformación se convierte, por tanto, en una herramienta esencial para revalorizar los productos de proximidad y preservar la riqueza cultural y gastronómica de los municipios.

Ante este escenario, la guía propone diversas estrategias para revitalizar la transformación agroalimentaria de proximidad y recuperar equipamientos esenciales para proveer a la ciudadanía de productos artesanos. En este sentido, destaca el papel de la Red de Obradores Compartidos (XOC) que impulsa y gestiona la Diputación de Barcelona desde 2018. Esta iniciativa, desarrollada en colaboración con los ayuntamientos interesados, trabaja para facilitar la diversificación de las empresas agrarias y apoyar a los jóvenes emprendedores del sector agroalimentario de la provincia.

Actualmente, esta red de obradores y mataderos compartidos engloba una amplia diversidad de iniciativas adaptadas a las especialidades productivas del territorio. Algunos ejemplos son la quesería del Lluçanès, el obrador comunitario del Parque Agrario de la Cuenca de Ódena, el obrador de huerta del Bages, el obrador de Gallecs o el obrador de Tagamanent. Además, la red también integra infraestructuras más específicas como la sala de despiece de carne del Parque Rural del Montserrat, el matadero móvil de la Cataluña Central o el pequeño matadero modular del Moianès.

Para más información sobre la Red de Obradores Compartidos, puedes escribir a Sònia Callau, responsable de la Dirección Territorial Agraria de la Diputación de Barcelona.