Con la llegada del otoño, el chinche apestoso marrón (Halyomorpha halys), un insecto de origen asiático que representa una grave amenaza para los cultivos catalanes, inicia su ciclo de hibernación. Este período es crucial para su proliferación, ya que busca refugio en espacios cerrados como edificios y viviendas, incrementando su presencia tanto en zonas urbanas como agrícolas.

Ante este desafío, la campaña de sensibilización ‘El bernat és aquí!’, liderada por el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA), la Diputación de Barcelona y el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, mantiene su enfoque en las acciones preventivas para frenar la expansión de esta plaga, con especial atención a los cultivos del Parque Agrario del Bajo Llobregat.

Un problema de doble impacto: molestias urbanas y daños a los cultivos

Detectado por primera vez en Cataluña en 2016, el chinche apestoso marrón se ha extendido por todas las provincias catalanas, consolidándose como una plaga de gran impacto social y económico. Mientras que en áreas urbanas provoca molestias debido a su capacidad de reproducirse y buscar refugio en hogares y edificios, el daño más significativo recae en la agricultura. Este insecto se alimenta de una amplia variedad de cultivos, desde frutales hasta hortalizas, causando importantes pérdidas económicas.

Según Helena Perxacs, gerente del Consorcio del Parque Agrario del Baix Llobregat, este año la plaga ha tenido un desarrollo desigual, con una reducción en las poblaciones respecto a años anteriores. Esto ha permitido mantenerla en niveles bajos, sin llegar a causar daños en los cultivos. No obstante, advierte que "no podemos bajar la guardia", especialmente en un territorio como el Baix Llobregat, con una alta densidad de población y un espacio agrario tan próximo a zonas urbanas, donde cualquier repunte podría tener graves consecuencias para la agricultura.

La ciudadanía como aliada fundamental

La clave para contener la expansión del chinche apestoso marrón radica en la implicación ciudadana. Las autoridades recomiendan varias acciones preventivas, como instalar mosquiteras para evitar la entrada del insecto en las viviendas y eliminar los ejemplares detectados utilizando métodos sencillos, como ahogarlos en agua con jabón o recogerlos con aspiradoras.

Además, la campaña ‘El bernat és aquí!’ fomenta la participación ciudadana en iniciativas de ciencia colaborativa. Las personas pueden contribuir enviando fotografías geolocalizadas de ejemplares al portal Natusfera, una herramienta esencial para que los expertos puedan trazar mapas precisos de la distribución de la plaga e identificar zonas donde aún no se ha registrado presencia o donde se está produciendo una expansión alarmante.

Recursos y materiales informativos

Para reforzar la lucha contra esta plaga, la campaña pone a disposición de la ciudadanía un amplio conjunto de materiales divulgativos, que incluyen infografías, folletos y fichas técnicas, accesibles en la web www.elbernatesaqui.cat. Estos recursos no solo explican cómo identificar al insecto, sino que ofrecen consejos prácticos para actuar de manera rápida y eficaz.

Según Helena Perxacs, “la colaboración activa de la ciudadanía no solo ayuda a mitigar los daños económicos en la agricultura, sino que también contribuye a evitar que el chinche apestoso marrón se convierta en un problema grave en el futuro”. La campaña, iniciada en 2022, ha sido clave para contener la plaga en el Parque Agrario del Bajo Llobregat.

Con el objetivo de preservar los cultivos locales y reducir las molestias a la población, la Diputación de Barcelona reafirma su compromiso de seguir trabajando en colaboración con el IRTA y otras instituciones para frenar la expansión del chinche apestoso marrón y proteger a la agricultura en el territorio.

Para más información sobre las acciones para controlar la plaga en el Parque Agrario del Bajo Llobregat, puedes contactar con Elena Isla, técnica del Consorcio del Parque Agrario del Bajo Llobregat.